“SOY LO QUE PONGO” – MARIO ALQUICIRA – PSICOANALISTA Y BIÓGRAFO DE ROCK MEXICANO
Radio UdeG Guadalajara
Presentación
Mi nombre es Mario Alquicira.
Soy psicoanalista y Maestro en Filosofía
Social. Desarrollo mi práctica clínica en la Ciudad de México y mi
actividad docente en distintas universidades que imparten posgrado en el país; soy
autor de diversos libros sobre psicoanálisis. He impartido conferencias y seminarios en
México y Argentina.
Publiqué en 2015 Los otros dioses ocultos (perfil de Jarris Margalli), finalista de la tercera convocatoria para libro
de no ficción del sello editorial De
Otro Tipo. Soy especialmente conocido por El último unicornio, retrato sobre Arturo Meza (Ala Ediciones, Colección Rock para Leer, 2022) con detalles nunca antes
revelados sobre este multifacético artista. Actualmente, preparo una suerte de
bitácora de viaje del grupo capitalino Trolebús, en la que por primera
ocasión, se muestran en su total desnudez. Basándome en documentos, archivos y
entrevistas, propongo un exhaustivo recorrido mediante una de las más
accidentadas travesías por los caminos y terracerías del rock mexicano.
Para el programa “Soy lo que pongo” hice una selección de los grupos y compositores que han sido mi banda sonora, cuyas letras y música hilvanan mi vida.
No puedo recordar cómo empezó mi obsesión por
Trolebús; se remonta casi tanto como para ser calificada de primer orgasmo.
Pero hay una fecha específica que solemniza el asunto. Una tarde de verano de
1988, a la edad de once años, perdí mi virginidad auditiva con una frase de
“Barata y descontón”. Estrictamente hablando, sólo perdí mi inocencia.
La industria radial y sus censores marcaron la canción, lo que la convirtió en algo totalmente provocativo.
1.- “Barata y descontón” – Trolebús / “Trolebús en sentido contrario” (1987)
Cuando logré escuchar el resto de las canciones, tras conseguir una copia de su disco, me familiaricé con la inconfundible voz del cantante José Luis Campos “Choluis”. Pero eso ocurrió más tarde, una vez que mi guía de patrulla Scout me acercó ese material, junto con una cinta con canciones de Choluis grabadas de manera casera. Un día descubro que el grupo se había disuelto. Paso los días y las noches soñando con su probable reencuentro. Pasan los meses y sigo soñando. Así pasa el tiempo, sin saber cuándo se hará realidad.
En horas en las que yo debía estar dormido, los domingos a las once de la noche, escuchaba el programa “Desde la redacción de la Banda Rockera” en Estéreo Joven (predecesora de Reactor 105.7 FM). Una vez, mientras violaba las restricciones horarias, llegué a escuchar la noticia de que Trolebús se había vuelto a integrar y que darían un concierto en la explanada de la Delegación Venustiano Carranza. Uno realmente nunca se imagina ni cómo ni cuándo se van a cumplir los sueños. El sueño de ver a mi grupo favorito en vivo se habría de cumplir con esa noticia.
Trolebús no me defraudó. Sin lugar a dudas, ver a
ese grupo causó en mí una gran impresión.
2.- “Séptimo piso” – Trolebús / “Urbanicidio” (1992)
La primera vez que vi en vivo a Arturo Meza fue en marzo de 1992 en Villa de Las Flores, Coacalco, muy lejos de mi lugar de residencia (en la zona sur del entonces D.F.). Yo tenía escasos 15 años. Me impactó sobremanera escuchar el tema “Ayunando entre las ruinas”. Fue como una impronta.
3.- “Ayunando entre las ruinas” – Arturo Meza / “Ayunando entre las ruinas” (1988)
En 1989, había caído en mis manos un casete grabado que tenía, de un lado, Sin título y, del otro, 70 centavos. Aunque lo escuchaba con regularidad, no fue sino a partir de ese concierto en Villa de las Flores que empecé a interesarme por conseguir sus discos originales y seguirle la pista. La única manera de enterarse de sus presentaciones era acudir semanalmente al Tianguis Cultural del Chopo o estar pendiente de escuchar en sus conciertos el anuncio de los siguientes. Después, tuve la oportunidad de establecer trato directo con él y conocerlo más de cerca. Sin duda, su música y su poesía, constituyeron una influencia determinante en mi formación humana y en la consolidación de mi identidad.
4.- “Sin rostro” – Arturo Meza / “Sin título” (1986)
5.- “70 centavos” – Arturo Meza / “70 centavos” (1989)
Como hijo único, yo era un adolescente taciturno y aislado. Mis intereses distaban mucho de ser como los del común denominador. Mientras los chicos de mi edad se entusiasmaban por los grupos de rock en inglés, yo me sentía cada vez más atraído por el rock mexicano subterráneo que había conocido gracias a la estación de radio Espacio 59. Anhelaba convertirme en músico y comencé mis lecciones de guitarra con Jarris Margalli, auténtico veterano de la escena rockera mexicana, que acababa de grabar su segundo disco con Mistus, titulado precisamente Eternamente subterráneo.
En 1991, Mistus se reunió para grabar dicho álbum con todas las piezas en español. Entre los músicos invitados se encontraba Saúl Hernández de Caifanes, con quien Jarris grabaría en 1999 el disco doble Bajo el azul de tu misterio.
6.- “Diferentes colores” – Mistus / “Eternamente subterráneo” (1991)
Antes de tomar a alguien como alumno, Jarris tenía la sana costumbre de hacerle una entrevista. Una de las preguntas era la siguiente: “¿cuáles son tus principales influencias?”. En mi listado de bandas y solistas no había ninguno extranjero; eso llamó poderosamente su atención. Nuestro vínculo se reforzó cada vez más. Empezamos a prestarnos discos de rock mexicano y a acrecentar nuestras respectivas colecciones. Así nació la idea de publicar un fanzine llamado Con los pies sobre la tierra, una de cuyas secciones era la referente a algunos discos clásicos de rock mexicano subterráneo de diferentes épocas y estilos. En esa selección de la extensa lista de discos resaltaban 70 centavos, Requiem, Ayunando entre las ruinas, Para un compa y En el monte de los equinoccios, de Arturo Meza. Por eso, puede decirse que el antecedente directo del libro El último unicornio fue ese fanzine, cuyo primer y único número apareció en octubre de 1992.
7.- “Para un compa” – Arturo Meza / “Para un compa” (1990)
Las referencias a la mitología y
sus simbolismos, que aparecen entretejidos en la obra de Meza, son muy
abundantes y complejas. Meza
construye un mundo mítico y fantástico al que llamamos meziano.
8.- “En el monte de los equinoccios” – Arturo Meza / “En el monte de los equinoccios” (1990)
Por su importancia dentro del ámbito rockero mexicano, se comentó en el fanzine la obra de grupos como Real de Catorce, 0.720 Aleación, Trolebús, Oxomaxoma, y se entrevistó a músicos como Eblen Macari, Germán Bringas, José Cruz y el propio Meza. Asimismo, se contó con la colaboración de personalidades como Arturo Huizar, quien cedió un poema inédito para su publicación.
9.- “Por piedad” – Arturo Huizar / “El emisario” (1988)
La presentación del fanzine se celebró con un concierto en el naciente foro de arte alternativo Jazzorca, el 20 de febrero de 1993. Dicho evento —que contó con la participación de Eblen Macari, Germán Bringas, El Túnel y Trolebús— marcó el inicio de las actividades en ese recinto. Para mayo de ese año, se había presentado ya el trabajo de artistas subterráneos como Arturo Meza, Oxomaxoma, Zol Negro, Rolando Chía, Raúl Tudón y Armando Velasco.
El sentido del recién inaugurado foro fue definido por el multiinstrumentista y propietario del mismo, Germán Bringas, como: “Un espacio para que los músicos puedan probarse ante el misterio de crear, sin disfraces, sin artimañas tecnológicas, sin apariencias publicitarias. Que también sea un reto para el público, para ver cómo anda su capacidad de asombro y de encuentro ante otro ser humano que simplemente va a cantar o a tocar”.
10.- “Caminatas” – Germán Bringas / “Tunel hacia ti”
Entrevisté a Meza por primera vez en 1992 en la casa donde vivía en la colonia Vértiz Narvarte, a propósito del fanzine ya mencionado. En esa época, estaba produciendo el casete doble A la siniestra del padre y terminando de escribir Ansina como endenantes, su primera novela. Muy amablemente me recibió y me concedió una hora de su valioso tiempo. En ese momento no imaginaba todavía que me convertiría en su biógrafo, sólo tenía la convicción de haber sostenido una conversación memorable.
11.- “El juglar se ha marchado del reino” – Arturo Meza / “A la siniestra del padre” (1992)
“El Nahual” es un tema escrito por Margalli a principios de 1979; en enero de 2001 hizo el primer demo con varias estrellas del rock mexicano, entre los que se encontraban Lalo Tex, Sergio Silva (Kerigma) y Ricardo Lassala (Ansia). La versión definitiva, que aparecería en su álbum Soul (2004), cantada a dueto con Arturo Meza, es menos grandilocuente, más rústica y jipiteca, en palabras de Jarris: más nahuatlaca-cósmica.
12.- “El nahual” – Jarris Margalli y
Arturo Meza / “Soul” (2004)
En 2022 el músico, poeta, novelista y pintor Arturo Meza cumplió 45 años de carrera profesional, y las celebraciones y homenajes no se hicieron esperar. El 21 de mayo presentó el espectáculo denominado “Corazón florido” en el Teatro Metropólitan al lado de 20 músicos con los que ha colaborado a lo largo de su trayectoria, más una orquesta sinfónica, ofreciendo una selección de temas de sus más de 30 producciones fonográficas. Ese mismo día fue lanzado el libro biográfico Arturo Meza. El último unicornio.
13.- “El último unicornio” / Arturo Meza / “Nod” (2008)
Para el programa “Soy lo que pongo” hice una selección de los grupos y compositores que han sido mi banda sonora, cuyas letras y música hilvanan mi vida.
La industria radial y sus censores marcaron la canción, lo que la convirtió en algo totalmente provocativo.
1.- “Barata y descontón” – Trolebús / “Trolebús en sentido contrario” (1987)
Cuando logré escuchar el resto de las canciones, tras conseguir una copia de su disco, me familiaricé con la inconfundible voz del cantante José Luis Campos “Choluis”. Pero eso ocurrió más tarde, una vez que mi guía de patrulla Scout me acercó ese material, junto con una cinta con canciones de Choluis grabadas de manera casera. Un día descubro que el grupo se había disuelto. Paso los días y las noches soñando con su probable reencuentro. Pasan los meses y sigo soñando. Así pasa el tiempo, sin saber cuándo se hará realidad.
En horas en las que yo debía estar dormido, los domingos a las once de la noche, escuchaba el programa “Desde la redacción de la Banda Rockera” en Estéreo Joven (predecesora de Reactor 105.7 FM). Una vez, mientras violaba las restricciones horarias, llegué a escuchar la noticia de que Trolebús se había vuelto a integrar y que darían un concierto en la explanada de la Delegación Venustiano Carranza. Uno realmente nunca se imagina ni cómo ni cuándo se van a cumplir los sueños. El sueño de ver a mi grupo favorito en vivo se habría de cumplir con esa noticia.
2.- “Séptimo piso” – Trolebús / “Urbanicidio” (1992)
La primera vez que vi en vivo a Arturo Meza fue en marzo de 1992 en Villa de Las Flores, Coacalco, muy lejos de mi lugar de residencia (en la zona sur del entonces D.F.). Yo tenía escasos 15 años. Me impactó sobremanera escuchar el tema “Ayunando entre las ruinas”. Fue como una impronta.
3.- “Ayunando entre las ruinas” – Arturo Meza / “Ayunando entre las ruinas” (1988)
En 1989, había caído en mis manos un casete grabado que tenía, de un lado, Sin título y, del otro, 70 centavos. Aunque lo escuchaba con regularidad, no fue sino a partir de ese concierto en Villa de las Flores que empecé a interesarme por conseguir sus discos originales y seguirle la pista. La única manera de enterarse de sus presentaciones era acudir semanalmente al Tianguis Cultural del Chopo o estar pendiente de escuchar en sus conciertos el anuncio de los siguientes. Después, tuve la oportunidad de establecer trato directo con él y conocerlo más de cerca. Sin duda, su música y su poesía, constituyeron una influencia determinante en mi formación humana y en la consolidación de mi identidad.
4.- “Sin rostro” – Arturo Meza / “Sin título” (1986)
5.- “70 centavos” – Arturo Meza / “70 centavos” (1989)
Como hijo único, yo era un adolescente taciturno y aislado. Mis intereses distaban mucho de ser como los del común denominador. Mientras los chicos de mi edad se entusiasmaban por los grupos de rock en inglés, yo me sentía cada vez más atraído por el rock mexicano subterráneo que había conocido gracias a la estación de radio Espacio 59. Anhelaba convertirme en músico y comencé mis lecciones de guitarra con Jarris Margalli, auténtico veterano de la escena rockera mexicana, que acababa de grabar su segundo disco con Mistus, titulado precisamente Eternamente subterráneo.
En 1991, Mistus se reunió para grabar dicho álbum con todas las piezas en español. Entre los músicos invitados se encontraba Saúl Hernández de Caifanes, con quien Jarris grabaría en 1999 el disco doble Bajo el azul de tu misterio.
6.- “Diferentes colores” – Mistus / “Eternamente subterráneo” (1991)
Antes de tomar a alguien como alumno, Jarris tenía la sana costumbre de hacerle una entrevista. Una de las preguntas era la siguiente: “¿cuáles son tus principales influencias?”. En mi listado de bandas y solistas no había ninguno extranjero; eso llamó poderosamente su atención. Nuestro vínculo se reforzó cada vez más. Empezamos a prestarnos discos de rock mexicano y a acrecentar nuestras respectivas colecciones. Así nació la idea de publicar un fanzine llamado Con los pies sobre la tierra, una de cuyas secciones era la referente a algunos discos clásicos de rock mexicano subterráneo de diferentes épocas y estilos. En esa selección de la extensa lista de discos resaltaban 70 centavos, Requiem, Ayunando entre las ruinas, Para un compa y En el monte de los equinoccios, de Arturo Meza. Por eso, puede decirse que el antecedente directo del libro El último unicornio fue ese fanzine, cuyo primer y único número apareció en octubre de 1992.
7.- “Para un compa” – Arturo Meza / “Para un compa” (1990)
8.- “En el monte de los equinoccios” – Arturo Meza / “En el monte de los equinoccios” (1990)
Por su importancia dentro del ámbito rockero mexicano, se comentó en el fanzine la obra de grupos como Real de Catorce, 0.720 Aleación, Trolebús, Oxomaxoma, y se entrevistó a músicos como Eblen Macari, Germán Bringas, José Cruz y el propio Meza. Asimismo, se contó con la colaboración de personalidades como Arturo Huizar, quien cedió un poema inédito para su publicación.
9.- “Por piedad” – Arturo Huizar / “El emisario” (1988)
La presentación del fanzine se celebró con un concierto en el naciente foro de arte alternativo Jazzorca, el 20 de febrero de 1993. Dicho evento —que contó con la participación de Eblen Macari, Germán Bringas, El Túnel y Trolebús— marcó el inicio de las actividades en ese recinto. Para mayo de ese año, se había presentado ya el trabajo de artistas subterráneos como Arturo Meza, Oxomaxoma, Zol Negro, Rolando Chía, Raúl Tudón y Armando Velasco.
El sentido del recién inaugurado foro fue definido por el multiinstrumentista y propietario del mismo, Germán Bringas, como: “Un espacio para que los músicos puedan probarse ante el misterio de crear, sin disfraces, sin artimañas tecnológicas, sin apariencias publicitarias. Que también sea un reto para el público, para ver cómo anda su capacidad de asombro y de encuentro ante otro ser humano que simplemente va a cantar o a tocar”.
10.- “Caminatas” – Germán Bringas / “Tunel hacia ti”
Entrevisté a Meza por primera vez en 1992 en la casa donde vivía en la colonia Vértiz Narvarte, a propósito del fanzine ya mencionado. En esa época, estaba produciendo el casete doble A la siniestra del padre y terminando de escribir Ansina como endenantes, su primera novela. Muy amablemente me recibió y me concedió una hora de su valioso tiempo. En ese momento no imaginaba todavía que me convertiría en su biógrafo, sólo tenía la convicción de haber sostenido una conversación memorable.
11.- “El juglar se ha marchado del reino” – Arturo Meza / “A la siniestra del padre” (1992)
“El Nahual” es un tema escrito por Margalli a principios de 1979; en enero de 2001 hizo el primer demo con varias estrellas del rock mexicano, entre los que se encontraban Lalo Tex, Sergio Silva (Kerigma) y Ricardo Lassala (Ansia). La versión definitiva, que aparecería en su álbum Soul (2004), cantada a dueto con Arturo Meza, es menos grandilocuente, más rústica y jipiteca, en palabras de Jarris: más nahuatlaca-cósmica.
En 2022 el músico, poeta, novelista y pintor Arturo Meza cumplió 45 años de carrera profesional, y las celebraciones y homenajes no se hicieron esperar. El 21 de mayo presentó el espectáculo denominado “Corazón florido” en el Teatro Metropólitan al lado de 20 músicos con los que ha colaborado a lo largo de su trayectoria, más una orquesta sinfónica, ofreciendo una selección de temas de sus más de 30 producciones fonográficas. Ese mismo día fue lanzado el libro biográfico Arturo Meza. El último unicornio.
13.- “El último unicornio” / Arturo Meza / “Nod” (2008)
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